En el año 2023, el gobierno lanzó el proyecto “New Youth Safety” antes de las elecciones generales, lo que provocó un aumento significativo en el volumen y precio de las transacciones inmobiliarias. Para resolver el problema del aumento constante de los precios de las propiedades, el gobierno decidió aumentar las tasas de interés de las hipotecas después de las elecciones en un intento de frenar la demanda. Además, para compensar la insuficiente regulación del sexto ciclo de control de crédito en el mercado inmobiliario, en septiembre de 2024, el banco central implementó el “séptimo ciclo de control de crédito”, que fue considerado como una orden de restricción crediticia para las instituciones financieras y tuvo un gran impacto en los derechos e intereses de los compradores de vivienda.
Después de un año de implementación del proyecto “New Youth Safety”, bajo la política de regulación financiera del banco central, el volumen de transacciones inmobiliarias en el país ha disminuido significativamente y la confianza en la compra de viviendas ha mostrado una tendencia a la baja. La demanda ha disminuido considerablemente y los procesos de aprobación de solicitudes en el proyecto “New Youth Safety” han sido más lentos. Esto ha generado preocupaciones y quejas entre los jóvenes que buscan comprar viviendas.
Aunque el gobierno tiene la intención de controlar el mercado inmobiliario y estabilizar los precios de las propiedades, la aplicación de medidas restrictivas como el aumento de las tasas de interés y la limitación del crédito pueden tener un impacto negativo en el mercado y en las personas que buscan comprar una vivienda. Muchos jóvenes han expresado su descontento y frustración por no poder realizar su sueño de ser dueños de una casa debido a estas políticas.
Es importante que el gobierno encuentre un equilibrio entre el control del mercado inmobiliario y la protección de los derechos e intereses de los ciudadanos, especialmente de los jóvenes que están luchando por alcanzar la estabilidad financiera y la independencia.
Esperamos que en el futuro, el gobierno pueda implementar políticas más efectivas y equilibradas para abordar los desafíos del mercado inmobiliario y proteger los derechos de los ciudadanos a la propiedad. Además, es fundamental que se escuche la voz de la juventud y se les brinde oportunidades para participar en el diálogo y la toma de decisiones en temas que afectan su futuro.
A pesar de los desafíos actuales en el mercado inmobiliario, confiamos en que juntos podremos encontrar soluciones para lograr una sociedad más justa y equitativa para todos. ¡Sigamos adelante con optimismo y determinación!