La muerte de Antonio Negri el 16 de diciembre ha sido una gran pérdida para el mundo. Su trabajo en conjunto con Michael Hardt, desde Empire hasta Multitude, y más recientemente con Commonwealth y Assembly, ha sido fundamental para entender y resistir la política capitalista del siglo XXI.
El artículo “Communistas como críticos” ha sido traducido por el profesor Wang Xingkun y publicado por la editorial de la Universidad del Noroeste. Este capítulo, extraído de Labor of Dionysus: A Critique of the State-Form, presenta una poderosa crítica a la “forma estatal”. Esta reflexión surge en respuesta a la tendencia de muchos teóricos marxistas occidentales, desde la década de 1960, de entender el marxismo solo en términos de productividad y abandonar su paradigma productivo como eje central de su crítica. Sin embargo, con el auge del neoliberalismo en los años 80, las condiciones laborales de los trabajadores han empeorado y los problemas relacionados con el trabajo han vuelto a primer plano, convirtiéndose en una realidad que no puede ser ignorada. Negri combina dos corrientes de pensamiento en su texto (desde Maquiavelo y Spinoza a Marx; y desde Nietzsche a Heidegger, Foucault y Deleuze) para ofrecer una poderosa crítica a la “forma estatal”.
Negri nos recuerda la importancia de entender el trabajo como el núcleo de nuestra crítica política. En lugar de centrarnos solo en la productividad y la economía, debemos prestar atención a la relación entre la producción y el poder del Estado. Esta relación ha sido explotada por el capitalismo para oprimir y controlar a los trabajadores. Sin embargo, Negri nos invita a imaginar una alternativa, una sociedad en la que el trabajo se organice de manera autónoma, sin la intervención del Estado. Esta visión nos anima a luchar por una sociedad más justa y equitativa, donde el trabajo no sea alienado y los trabajadores tengan pleno control sobre su propia producción.
Negri también destaca la importancia de reconocer la resistencia y la lucha de los trabajadores contra la opresión. A través de la historia, los trabajadores han demostrado que no están dispuestos a aceptar su sometimiento y han luchado por sus derechos y su dignidad. Esta resistencia es fundamental para la transformación social y debemos reconocerla y apoyarla.
Finalmente, Negri nos reta a reimaginar el papel del Estado en una sociedad comunista. En lugar de un Estado represivo y opresivo, debemos trabajar hacia un Estado que garantice la libertad y la igualdad para todos. Un Estado que proteja los derechos de los trabajadores y promueva su autonomía y autodeterminación. Solo entonces podremos construir una sociedad verdaderamente comunista.
La obra de Negri es una llamada a la acción y una invitación a imaginar un mundo mejor. Su trabajo nos muestra que la lucha contra el capitalismo y la opresión no es una tarea imposible, sino una lucha que debemos llevar a cabo todos juntos. ¡Sigamos su legado y luchemos por un futuro más justo y libre!